La botigueta de l'Alex

La botigueta de l'Alex
Free Macadamia!

Dept. de Comunicación

Que Grande es el Cine, by Elnan

Palaceteños

Sara Carbonero, Musa Oficial

Sara Carbonero, Musa Oficial

miércoles, mayo 30, 2007

PALACETE SPAGHETTI WESTERN, by Corser Morricone


La luz se colaba por las múltiples rendijas de la pared del Burdel. Abrió los ojos lentamente. Se sentía aturdido y desorientado. La botella de whisky vacía que tenia en la mano debía ser la causante de su lamentable estado. Sudado se levantó del catre, hacía un calor de mil demonios en aquellas tierras. Escupió con desprecio los restos de tabaco de mascar que le quedaban en la boca. El hedor nauseabundo que emanaban sus axilas le hizo sentir algo de asco de si mismo en primera instancia, ya que llevaba tres semanas sin darse un triste baño, pero ser un apestoso se había convertido en algo rutinario y le dio igual. Se miró en un pequeño espejo que había enfrente suyo y no pudo retener una pequeña expresión de tristeza al ver el horrible ser en el que se había convertido. Múltiples peleas en bares y los más variopintos tugurios le habían desfigurado la cara, haciéndole perder en una de ellas un ojo, sobre el cual llevaba un negro parche. Solo le quedaban 4 dientes sanos, algunos perdidos por puñetazos de sus rivales en sus habituales reyertas, otros podridos de no lavárselos. Llegó un punto en que no podía ni comer, así que se había puesto algunos de oro, arrancados de alguna de sus víctimas. La roña y la larga barba no contribuían a embellecer lo mas mínimo su rostro. Parado el Sucio era un caza-recompensas de nulo prestigio, aunque alguna pesquisa que otra le permitía ir tirando, aunque no se andaba con chiquitas si no disponía de dinero, y robaba, mataba, violaba o vendía su culo si era de menester. Después de rascarse el paquete durante un buen rato, se atavió con sus harapos y su ridículo sombrero mejicano y se dirigió al Saloon. Después de tropezar torpemente con las escaleras y golpearse con la puerta en el hocico, se plantó en la barra disimulando con cara de duro el dolor que le invadía; aunque no pudo evitar que aflorara una lagrimilla, que se secó con la manga de la camisa, aprovechando a su vez el gesto para limpiarse los mocos. Kim, el barman, le miró con cara de indiferencia mientras secaba un vaso.

-Hombre Parado, usted por aquí –espetó de tarradellas una aflautada voz a su derecha.

Parado se dio la vuelta con dificultad, ya que la joroba le condicionaba los movimientos laterales, y vio un joven, vestido con camisa rosa chicle, chaleco de leopardo, ceñidos pantalones de lycra negra y botas de pelo blanco.

-Vete a tomar por culo, Sub. Dijo, con su amabilidad y simpatía características.



Foto de Parado en su juventud

Subby El Niño era el hijo adoptivo del Sheriff Fórceps. Éste se lo encontró cuando era un bebé revolcándose por el barro y las heces junto a los cerdos de Rummy, el granjero, cuando se disponía a una de sus sesiones de zoofilia, de la que era un adicto confeso. Fórceps Baxter, Sheriff y Gobernador de Palacete City y ex-capitán del 238º de caballería, pagaba generosas cantidades a Rummy para que le dejara hacer toda clase de prácticas sexuales con los animales de su granja. Y digo ex capitán porque fue expulsado del ejército cuando el Mariscal Tro le sorprendió percutiendo con virulencia al cabo Raimon “Ojal de ángel” Van Cleef, mientras su adiestrado caballo le penetraba a él. Después de aquello, y tras pasar por la vicaría, los dos tortolitos se hicieron con el mando de Palacete City (previa liquidación del Sheriff anterior y sus acólitos), gobernándolo con mano de hierro y esclavizando a su pueblo, mientras compartían tórridos atardeceres en las llanuras y los maizales, correteando desnudos y dando rienda suelta a la pasión desenfrenada, como en su juventud en la montaña Brokeback. Huelga decir que cualquiera que se sublevara contra el régimen establecido, era liquidado sin compasión y violado post-mortem ante sus familiares, práctica que habían aprendido de los Arapahoes de las Plumas Doradas, tribu india conocida no precisamente por su virilidad. Joan CG, jefe de la tribu, les instruyó en el arte de la tortura, la meditación trascendental mediante toda clase de drogas, la fotografía para aficionados y los fenómenos que no dudaría en calificar de paranormales, y no digo más.

Soy una tómbola.



Fórceps, con su descendencia porcina

jueves, mayo 24, 2007

Falsete XVIII, 2ª parte, by Moi

Finalmente llegó el día por todos esperado. Se trataba del Primer  
Open Palacete de Golf. Subcomandante se encargó de dar la bienvenida  
a todos los participantes con un discurso institucional.
No faltó de nada, incluso se habilitó una Carpa a modo de "Village"  
para que todas las autoridades y participantes pudieran descansar y  
relajarse durante la agotadora jornada de golf. Durante las primeras  
horas de torneo, todo transcurría de manera estupenda tal y como  
Moisés (Cabeza de Protocolo y Sub-director del Torneo) había  
planificado. Por la tarde, los nervios, la tensión, el cansancio y  
los estupefacientes ingeridos hicieron mella en algunos jugadores.  
Cabe destacar que Alex Autòmata fué expulsado de la competición al  
serle confiscadas unas pelotas de golf teledirigidas por control  
remoto. Así se explica su excelente resultado en los 9 primeros  
hoyos. Con la descalificación de Alex, fué RichiWichi quién se puso  
en cabeza como líder destacado, aunque un pletórico Capitán Fórceps  
le iba recortando terreno golpe a golpe. Muchos participantes  
intentaban hacer todo tipo de trampas y triquiñuelas pero tanto la  
seguridad del Torneo así como los comisarios de campo dirigidos de  
manera excelente por el eficaz Moi, se mostraban implacables ante los  
tramposos.
Por otra parte, Ant cayó fulminado en el búnker del hoyo 16 producto  
de una insolación, según rezaba el parte médico. Ant fué trasladado  
de inmediato al Hospital de Palacete para ser tratado por las  
quemaduras sufridas en el 35 por ciento de su albina piel.
Muchos jugadores iban tomando copas entre hoyo y hoyo, es el caso de  
Raimon, que precisamente por su adicción al alcohol no pudo ofrecer  
al público sus mejores golpes. Raimon estaba tan seguro de sí mismo  
que pensó que ganaría el torneo incluso yendo borracho.
Tras más de 12 horas de intensa y calurosa competición, borracheras,  
trampas, descalificaciones, escenas de sexo descontrolado en el lago  
y demás cuestiones, RichiWichi ganó el Open Palacete tras derrotar a  
Fórceps en el último hoyo.








Richiwichi coronado como Campeón del Open Palacete





El Capitán Fórceps, Morgana y El 10 observan un golpe de Patty.
Nótese que el10 le está mirando el trasero a Patty








El Chiringui vibrando desde las gradas con el público, jaleando la 
victoria de Richi







Los Drs. J y BE posan ante la cámara, agarrándose a la bandera para 
no caer al césped tras haber ingerido litros y litros de cerveza....







El Señó Cherinola embocando ante la atenta mirada del Mariscal Tro






Joan CG, Keksi, Pe y Corser mostrando su innata elegancia vistiendo 
ropa clásica





KIM, Señor Paradox y ElNan, en un descanso entre hoyo y hoyo





Moisés siguiendo la jornada a pié de campo
y saludando a las
autoridades





Mr.Towers, preparando el almuerzo en los palcos V.I.P de Palacete






Panorámica del Hoyo número 5. En la imagen vemos al Subcomandante en el green junto a El Confident






ANT, mostrando orgulloso sus quemaduras en la habitación del Hospital




El Subcomandante dando la bienvenida a todos los participantes y
público en general





Imagen del rotundo éxito del Village del Torneo




Rummi; muy elegante vistiendo de negro y Raimon; con camisa hawaiana hortera al estilo Tom Selleck en la serie "Magnum".

sábado, mayo 19, 2007

Falsete XVIII, by Moi

-Malditos hijos de perra!!!- espetó Raimon.

Serían alrededor de las 3 de la madrugada y allí estaban ellos, Subcom, el Capitán Fórceps y Rai. Habían bajado a la bodega del Palacete para charlar de sus cosas, fumar, hacer unas partidas al parchís, beber y filosofar sobre la vida.

-Serán desgraciados, me van a oir!!- sollozaba Rai.

-¿qué sucede pichulín?-dijo Sub.

-pues mira, esta tarde he dejado justo aquí, un plato con jamoncito del bueno y unos tacos de queso por si nos entaraba hambre y ha desaparecido. Tienen que haber sido los sirvientes de Palacete que lo habrán subido a la cocina o en el peor de los casos, se lo habrán jalado los muy cabritos!!....y con el hambre que tengo yo ahora.....-imploraba Raimon.

-Pues sube a la cocina a buscarlo- dijo Fórceps.

-Sí hombre, ¿y qué más?, te recuerdo pichón que la cocina está en el otro ala de Palacete y además, con la caraja que llevo encima, iba a tardar no menos de media hora, eso si no me clapo por algún pasillo de camino a la cocina. Ni hablar, me niego!!

A esas horas, el mayordomo ya no estaba de servicio, así que no podían contar con su inestimable colaboración. Entonces a Sub se le ocurrió que podrían llamar por circuito interno a las habitaciones de Palacete para ver si alguna alma caritativa sería tan amable de traerles un tentempié.

Primero llamaron a Alex, pero al parecer, éste se encontraba en el laboratorio construyendo un nuevo autómata, con más aplicaciones y de menor tamaño.

También llamaron a El Chiringui, pero estaba en el baño de su habitación depilándose el pubis con la llamarada de un zippo.

Eldeu hacía horas que dormía como una marmota porque al día siguiente tenía partido y ni siquiera oía el sonido del telefonillo.

En la habitación de Ant, nadie contestaba, así como tampoco en la de Patty y Morgana.

Llamaron a Penélope:

-¿digame-lón?- contestaron

-Pe? ¿qué te ha pasado en la voz? ¿ya has vuelto a tomar hormonas masculinas?- contestó Sub.

-No hombre, yo no soy Pe, soy Ant que estoy en su habitación.

-Ah!! ¿y eso?- preguntó Sub.

-Pues nada, que las chicas estaban un poco calientes esta noche y han decidido montarse un trío-respondió Ant.

-Carai, sí que van fuertes, tú!!. ¿y a tí para qué cojones te quieren en la habitación?-volvió a preguntar Sub, poniéndo cara de incredulidad....

-Pues nada, para que les haga una grabación con mi cámara digital, porque quieren mandarle la cinta al Dr.J, a ver si con sus contactos en el cine Porno, pues consigue que alguien las contrate como actrices para alguna peli. Eso es todo, pero la verdad es que yo ya voy muy cachondo....

-No me extraña Ant, en fín, no os molesto más. Si acaso ya me haces una copia de la cinta y me la dejas en la entrada.

-Sí, sí tranquilo, cuando edite el vídeo, ya os pasaré una copia con los highlights- respondió Ant.

En fín, las chicas se estaban poniendo moradas y el resto de llamadas resultaron infructuosas.

-Coñe Sub, llama a Moi!!-dijo Raimon.

Efectivamente, Moi (un tipo servicial dónde los haya), era el que menos ocupado estaba en ése momento. Solamente tuvo que interrumpir su sesión diaria de yoga y meditación.

Moi bajó a la cocina y preparó con esmero un refrigerio para los Capos de Palacete.

Cuando llegó a la bodega, se encontró a Rai, Sub y Fórceps borrachos como cubas, riendo y gritando como gorrinos. Moi hizo un escaneado de la situación y vió botellas vacias de vino, bourbon, coñac, grosella y actimels....habían bebido como cosacos. Es posible que también se hubieran bebido el agua de los floreros que decoraban ésa entrañable estancia de Palacete, para muchos, la más preciada y acogedora de todas.

De pronto, el olfato de Moi le alertó de que algo iba mal, entonces, realizó un nuevo escaneado de la salita y respiró tranquilo, cuando comprobó que se trataba de los pantalones de Rai, que estaban algo húmedos. Sólamente se trataba de otra de sus marranadas.

Es posible que Rai se hubiera orinado encima sin darse cuenta siquiera.

Es normal, todos conocemos el dicho: “el que no mea, no bebe”. Pues bien, Rai no había parado de beber en las últimas 5 horas y claro, en ése estado etílico, ir al baño resultaba una tarea harto-complicada. Era más, muchísimo más cómodo hacérselo encima y pasar de ir al W.C. Al momento, Moi hizo otra comprobación y se percató que los pantalones de Sub y las mallas de leopardo de Fórceps, también estaban mojadas.

-Pues sí Moi, ¿qué pasa?, nos hemos meado todos encima, ¿algún problema?- rebuznó Fórceps indignado.

-No, no, a mi me da igual- contestó Moi.

Aunque en su interior, estaba escandalizado con la escena surrealista y denigrante para la condición humana que estaba presenciando.

-Bueno, yo ya me iba...-dijo Moi.

-Va hombre, quédate un rato con nosotros- le pidió Sub.

-No me dejes sólo con éstos 2 animales....- le suplicó Sub, esta vez, poniéndose de rodillas y agarrando a Moi por la túnica.

-Jajajajajajajajajaja- rieron todos a carcajadas.

-Bueno, me quedo un ratito con vosotros- contestó Moi.

-Ummm que rico!!, que buenos están estos bocaditos que nos has preparado- dijo Fórceps.

-Sí, nada que ver con los canelones que nos prepara Penélope, que a simple vista parecen un campo de alcachofas radioactivas- añadió Rai.

-Juasjuasjuasjuasjuasjuasjuas- todos se descojonaron de nuevo, incluso Sub, se cayó de la silla y desde el suelo, seguía retorciéndose de la risa.

Una vez comieron el tentempié que les preparó Moi, siguieron charlando de sus cosas. Al parecer, Fórceps y Rai se lamentaban de la imposibilidad de conectarse on-line para jugar al golf cada uno desde su habitación. No entendían porqué el sistema informático fallaba una y otra vez. Pensaban que algún error deberían estar cometiendo.

Entonces a Moi se le ocurrió una idea.

-¿Porqué no os dejáis de chorradas, de jueguecitos, de internet y tal?, deberíais construir un campo de golf en Palacete- les dijo Moi.

-Vamos hombre!!, esa es la tontería más grande que he escuchado en los últimos 45 minutos de mi triste existencia, mira Moi, tendría que retrotraerme hasta 1943 para poder discutir con alguien de tu capacidad intelectual actual- respondió Rai.

-Brillante Moisés!!- espetó Fórceps.

-Magnifique!!- comentó Sub poniendo acento francés.

Rai había vuelto a quedar con el culo al aire.

-Buena idea Moi, yo ya lo dije- rectificó Rai con cinismo pero con mucha gracia.

-Jajajajajajajajajajaja- volvieron a reír todos juntos, aunque en esta ocasión, Sub no se cayó de su silla.

Lo cierto es que disponían de tierras y prados extensos limítrofes al Palacete. Eran propiedad suya y representaban parte de su patrimonio. Así que les pareció una gran idea. Habían decidido la construcción de un campo de golf allí, al ladito mismo. Los cuatro alzaron sus copas y brindaron por el acuerdo.

Además, pensaron en organizar torneos, para de esta forma poder medirse los unos contra los otros para ver quién la sabía meter mejor en el agujerito.

Le encargaron a Moi (como director de comunicación y relaciones externas) la tarea de ir a negociar el asunto con los directivos del Grupo Cherinola, un conglomerado de sociedades propiedad del Señó Cherinola, de hecho, se trataba de un Grupo empresarial que se dedicaba al mundo de la construcción en general y a la creación de campos de golf en particular.

Así pues, a la mañana siguiente Moi se fue a la sede central del Grupo Cherinola para tratar el asunto. Allí lo recibió el señor Parado, un auténtico lince para los negocios.

Poco a poco se fueron sentando las bases del acuerdo y al cabo de unas semanas, se decidió dar el pistoletazo de salida a las obras de construcción.

Primero hubo un movimiento de tierras por parte de las excavadoras de la empresa constructora y poco a poco se fué dando forma y color al sueño de los Capos palaceteños, que ya se veían jugando a golf a diario.

Así pues, al cabo de unos meses, llegó el día de la inauguración oficial, a la que no faltaron los políticos. Por aquélla época habían elecciones en la comarca palaceteña y todas las instituciones y personalidades quisieron salir en la foto a fin de obtener más votos en las urnas. En fin, es lo que hacen siempre....

Se decidió inaugurar el campo con un Torneo, el “Open Palace”, y podían asisitir jugadores de toda la región.

miércoles, mayo 16, 2007

Mou-te per Palacete!, by Rai Hereu


- ¿Rai ? – espetó Keksi – Oiga, Towers yace en el pasillo suroeste de Palacete completamente borracho y con unas bolas chinas en el ojete. Qué hago?
- Mierda! Está J todavía por ahí?
- Aquí lo tiene, bien rasuradito como me pidieron. Un buen par de tetas y será un ejemplar de she-male fabuloso. Se lo llevo yo a la azotea?
- No, olvídalo. El helicóptero no anda fino. Creo que tiene el diferencial hecho polvo, la hélice central y la de popa van cada una a su aire, originando con ello grip desigual, rotación asimétrica y desgaste del eje. Mira, bájame a J al jardín. Y con garbo.
- A sus órdenes, mi señor.

Cogí a J de la entrepierna y enfilé el sendero que cruzaba el jardín. Se me hacía tarde. Volví a comprobar el lugar y la hora de entrega del paquete (un paquete muy misterioso y secreto que le da una emoción de cojones a la trama): C/ Muñeca Chochona nº 253, a las 12:30 horas. ‘Ven con el cabeza hueca’.


Y tan cabeza hueca... había llegado un momento en que los resets continuados de J empezaban a tocarme los cojones de verdad. Ya ni le respondía cuándo me inquiría mi identidad, o bien le contestaba la primera soplapollez que me pasaba por la cabeza. Coño con el sifilítico...

De repente, una mano gruesa y curtida apareció de detrás de un matorral y me agarró fuertemente del hombro. Aquel dedo anular con el enorme anillo del yugo y las flechas me revelaron automáticamente la identidad del interfecto.

- No estoy para mariconadas, Paradox!
- Le veo nervioso y con prisas, Sr. Raimon.
- Como que tengo una cita y llego tarde, cojones.
- Entiendo. Déjeme a mí a J. Yo se lo entretendré un ratito. Ya verá como le espabilo!
- Ya sé yo lo que usted entiende por entretener y espabilar, vicioso depravado... Sabe que con gusto se lo dejaría, pero necesito llevármelo conmigo. Pero mire, si quiere hacerme un favor, présteme ese trozo de manguera que me lo voy a llevar atado del cuello y a cuatro gatas.
- Aquí tiene. A mí también me gusta tenerlos atados y a cuatro gatas...

Justo en ese momento el coche de los Fórceps, un Hispano Suiza del 34 conducido por el fiel y diligente Rummi, se detuvo ante el colmado de Palacete. Iban a hacer la compra. Me quedé mirando fijamente a Fórceps y le hice la señal acordada. Éste, tras percibir mi señal, respondió en un perfecto escocés:


- Amdabán am al pugrama, Rai!

Mientras los Fórceps entraban en la tienda (no sin antes atar a Rummi a la puerta de la misma) acabé de cruzar el jardín y llegué a la puerta principal de Palacete. El tráfico a esa hora era un completo caos. ‘Hostia, no voy a llegar’.

- ¡Mozo! – grité. ¿Moisés te llamas, verdad? Mira, llévame a cuestas a la C/ Muñeca Chochona.
- Pero señor, pesa usted más de 80 kilos y tengo la espalda destrozada...
- ¿Ha vuelto a darte Sub?
- Toda la noche, señor, toda la noche. Es insaciable.
- Y qué lo digas. Valiente sodomita...
- Que le lleve J a cuestas, ¿no? – sugirió Moi.
- ¿Éste? Ni hablar. Tendría que repetirle la dirección cada 30 segundos...
- Ya veo... Señor, permítame una sugerencia. Ya sé que los de su escalafón no lo tienen por costumbre, pero creo que es el mometno oportuno de utilizar el Metro de Palacete.
- ¿Cómo dices? ¿Con los obreros? ¿Con la chusma?
- No huelen tan mal, no se crea. Mire, para ir a la Calle Muñeca Chochona tiene una combinación bastante guapa. Y sobre todo, rápida. A ver... – se sacó del bolsillo el mapa de la red de SubGay de Palacete y empezó a describir el itinerario - Mire, tiene la estación de Pza. Palacete a 30 metros de aquí. Son esas escaleras que van para abajo... Coja la línea roja. Luego sólo tiene que hacer transbordo en Flavia, coger la amarilla y bajarse en Ánsar-Yorstaun. Lo ve?
- Uhmm... ¿y seguro que no voy a coger la tuberculosis o el tifus? Bueno, venga, te compro la idea. Ahora fuera de mi vista, anormal.


Mapa de la Red de SubGay de Palacete (Homenaje a Kim)


Me dirigí a la boca del metro con J atado con la manguera y seguí las instrucciones de Moi al pie de la letra. Sorprendentemente, éstas eran correctas y a las 12:25 minutos estaba delante del nº 253 de la C/ Muñeca Chochona. Se trataba del local de Streaptease Dei-Yang.

El olor a humo y a perfume barato me recordaron no ya mi juventud, sino lo que había sido casi toda mi vida. Una vida de burdel en burdel, de antro en antro, alimentándome exclusivamente de alcohol y familiarizándome con el apasionante y desconocido mundo de las venéreas.

Era un local infecto, con una iluminación deprimente y una clientela de lo más bajo. El tiempo parecía haberse detenido para esas almas en pena. Las políticas surrealistas del anterior Ministro de Economía Oscarini (ahora Papa Botarate Sétimo) habían dejado la economía de Palacete hecha un solar, con más del 70% de la población en el paro y aficionada al alcohol y la prostitución.

El Doctor BE y Joan CG servían en la barra y parecían los únicos ajenos a la depravación del lugar. De repente me topé con Corser y Kim, que con los ojos vidriosos me espetaron:

- Haznos un paja, tío.
- ¡Salid de aquí, guarros!- les dije apartándolos con un fuerte uppercut de derechas.


De repente la iluminación cambió y se hizo el silencio. Patty, Morgana, y Pe aparecieron en el escenario disfrazadas de orientales, ligeritas de ropa y con un apurado que revelaba su paso por la gillette afilada de Keksi hacía pocas horas. Cada una de las tres se agarró con una mano a la barra y Pe, la más dicharachera, empezó a cantar.











Dios mío, qué espectáculo tan denigrante, pensé. Las tres chicas intentando bailar y moverse de forma sugerente al son de la canción... los espectadores disfrutando embriagados las evoluciones de esas gallinas pechugonas y de esos movimientos de piernas alrededor de la barra... el señó cherinola, agitándose como un loco sobre su silla de ruedas, babeando y gritando frases ininteligibles...y el más extasiado, Ant Hefner, manejando aceleradamente sus 13 cm púbicos y mostrándose como el más hábil y desprendido a la hora de colocar billetes de 5 euros debajo del sujetador o las braguitas de las chicas.

Éstas, simulando agradecimiento, respondían sacándose alguna de las prendas de ropa que todavía conservaban. Mientras, del lavabo no paraban de entrar, y luego salir con los ojos inyectados y la nariz bien congestionada, personajes de todo tipo y calaña. Àlex, Sub, HRubesch, Elnan, etc..., todos habían ido a hacer ‘sus necesidades’.

La música concluyó, y las tres chicas acabaron compeltamente desnudas sobre el escenario. En ese momento apareció Chiringui, un tipo muy raro con una máscara grotesca y una cara de mala hostia cosa mala, que tras quedarse con todo el dinero cogió a las 3 chicas, se las cargó a su espalda como si fueran sacos de patatas, y desapareció entre el humo.

Era ya la 1 del mediodía. El ambiente viciado me impedía mantener los ojos abiertos, y el humo de los porros empezaba a desorientarme. De golpe, caí en la cuenta de que J había desaparecido.

- ¡Cáspita! – espeté.




¿Existe en Palacete una red secreta de operaciones de cambio de sexo y borrado de memoria para prostituir a los->las pobres víctimas?
¿Era Morgana antes el Sr. Pedro Sánchez Sánchez?
¿Y al revés? ¿Era Subcomandante antes un a muñequita chochona?
¿Cuántos están implicados en la trama?
¿Podrá el Dr. J escapar de las garras de esta maléfica red, o ya es demasiado tarde?
Y lo más importante, ¿pillará Rummi una insolación de mil pares de cojones atado a las puertas del colmado de ultramarinos de Palacete horas y horas mientras los Fórceps deciden qué marca de yogures compran esta semana?

Las respuestas a todas estas preguntas, en el próximo capítulo de la apasionante telenovela de Palacete History X.

O no.

lunes, mayo 14, 2007

Gillet Blue II, by Mr. Towers de Bultaco de Vega




La porta s’havia tancat darrera seu i J es va quedar sol, parat i desorientat en aquell passadis ample, llarg i solitari com un final de lliga de 5 partits i 2 punts d’aventatge respecte l’innombrable. “Tranquil, J, respira” es va dir, “per algun lloc has de portar enganxat un post-it”. Va rebuscar pel lloc més evident, però no hi va trobar res: l’entrecuix estava buit de post-its. En canvi el va sorprendre el tacte: finet i llis com el cul d’un bebé. Ni un sol pèl pèlvic en tota aquella zona. Ni per davant…ni per darrera. No va poder evitar refregar-se amb la ma. Una fuetada d’electricitat va connectar la punta dels dits amb aquella part del cos. El cor se li va accelerar, la suor queia, la respiració es tallava, la ma es movia, el múscul s’enduria, tot girava, ràpid, més ràpid, més…



“dispondrá usted de un harén de 12 sirvientas a las cuales deberá dirigir con mano firme, las fiscalizará y controlará”. Tough job.


-Bon dia J, ¿tot bé? Et veig una mica desencaixat, estàs molt suat…

J es va intentar recompondre a tota velocitat. Aquell tio l’havia interromput justament a dos dits del clímax. I malgrat tot, una immensa taca s’escampava pels seus pantalons, engonal avall. Aquella sensació, aquell tacte suau, finet, llis, l’havia transportat per un breu instant a algun lloc del passat, a una altre dimensió, lluny i al mateix temps dins seu. Havia fregat per uns instants alguna cosa molt profunda, la clau de la seva desmemòria. “Gillet blue 2…Gillet blue 2…Gillet blue 2” un eco apagat no parava de repetir aquest mantra dins els seu cap…Fins que el capullu aquell l’havia interromput. Però.. ¿i qui era el tio aquell? ¿com havia sabut el seu nom?

-un moment…¿ens coneixem?

-No, Soc Towers, Mr Towers. El nou majordom del palau, i m’han dit que et condueixi davant Rai per la partida de mus dels divendres amb Fòrceps.



Fórceps de camí cap a la partideta de mus. Vestit amb la equipació de local i exepcionalment el veiem amb una màscara protectora per evitar agreujar la fisura de pòmul. La foto demostra clarament que la dita “el caradura de Fórceps” no és més que un infundi, una falàcia


“¿Fòrceps? ¿Hannibal Fòrceps?” ¿de què li sonava aquell nom? “Hannibal rima amb canibal” va pensar “però Fórceps no té cap rima racional” va tornar a pensar…”potser Fórceps no és racional…”. Però hi havia una cosa que encara intrigava més a J: ¿com sabia el seu nom si ni ell mateix el sabia?

-però…un parell de coses ¿has dit Hannibal Fórceps?… i …¿com m’has conegut??

-A lo primer, no. Fins on jo se no existeix ningú que es digui Hannibal Fórceps. És Capitan Fórceps, o a lo sumo, Hans Fórceps, però això últim només en una altra dimensió paral·lela on més val no entrar que seria massa llarg i liaria a l’audiència. En quant a lo segon, m’han dit que portaries aquest enorme post-it al mig del front que diu “Soc J, perdo la memòria cada 15 minuts, soc del Barça i necessito 2 paquets d’arròs i un Kilo de patates”. A banda que m’han dit que portaries un vestit inconfusible…

J es va mirar. De bon principi ja li havia sembla intrigant la manera com l’havien vestit: un tutut rosa amb sabatilles de ballet a joc i unes orelles de conilleta rematant el cap…J i Towers van començar a caminar entre armadures i quadres d’avantpassats. Els ulls de tots aquells il·lustres difunts seguien expectants la silenciosa caminata, les seves cares deformades per tants casament dins el mateix llinatge, cosins i germans, incestos i disculpes papals. Encara corrien pel poble llegendes de criatures desaparegudes prop del Palau. Alguns vells encara recorden com les seves iaies cantaven la cançoneta:

A prop del Palau, n’hi havia una nena

Jugant vora el riu, la brisa corria

Si en ve el Senyor Duc, li agafa la cama

La Porta a Palau, l’enforca i l’empala

Se li beu la sang, li menja la cama.

Ai nena al Palau, no hi passis aprop

Que vindrà el Duc, tocant-se el garrot

Ja al SXII Fra Domenico Modugno citava en la seva “De Novarum Guium Campsum – annus domine 1141” la desmesurada passió d’aquell llinatge per la carn crua. Carn crua en tots els sentits…

En el passadis la mirada dels ulls d’aquells quadres carregats de pols centenària semblava cada cop més amenaçadora i J s’estava acollonint per moments. Towers va decidir que era el moment. Estava al lloc precís. Les instruccions eren clares. Disparar a J el dard adormidor just davant la porta de l’ascensor, pujar el cos fins el terrat del palau esperar l’helicòpter, i un cop a la base desxifrar el missatge en clau que portava J. Towers va deixar que J passes uns metres endavant, es va treure dissimuladament la cerbatana del seu amagatall (amb lo que el recte anal va recuperar la seva laxitud original), va calibrar la mira telescòpica, va tancar l’ull dret, i amb l’altre (el de vidre) va enfocar la mira, i va girar 0,5 graus aquells 80 centímetres de cerbatana fins enquadrar perfectament l’espatlla de J.

Però just quan anava a bufar, Towers ho va veure tot negre. Alguna cosa fosca va omplir per complert la mira telescòpica de la cerbatana. Un enorme casc d’armadura el mirava per l’altre forat de la mira. Una de les armadures que flanquejaven la porta de l’ascensor s’havia mogut, i amb els sigil i agilitat característica d’una armadura de 400 anys, li va pendre la cerbatana i li va disparar a ell el dard. Towers va caure a terra fulminat tan llarg com era (uns 93 cms), i l’armadura va tornar al seu lloc, immòbil i acumulant pols com en els darrers 400 anys. J havia contemplat sorprès tota la escena, i va recollir molt encuriosit la cerbatana amb mira telescòpica, doncs li recordava vagament a alguna cosa dels subconscient.

Mentre tant, Keksi, satisfeta i relaxada, es baixava la cremallaera de les seves botes de cuir negre. Els fins tacons d’agulla la transportaven a una alçada quilomètrica i vertiginosa. “Vístelo, peínalo, afeitalo y mándaselo a Rai en 15 minutos”. Efectivament i tal com li havia manat Moi, havia deixat aquell pollu ben afaitat. Lliset i finet per tot arreu. Absolutament per tot arreu. Va guardar la resta de les prendes de cuir a l’armari i els complements metàl·lics a la caixa: manilles, fuets, pinces i navalles d’afaitar. Estava realment satisfeta de la seva marca, acabava d’establir el seu clímax més ràpid, ajustant-se perfectament al timming de Moi: 14 minuts i 39 segons. Va sortir de la seva habitació al passadis per agafar l’ascensor, i es va trobar just davant els morros amb Towers estirat a terra, les dues armadures immobils flanquejant l’ascensor i a J amb els seu tutut rosa, sabatilles de ballet i orelles de conilleta, amb una cerbatana amb mira telsescòpica a les mans.




Primer pla dels dits dels peus la mar de relaxats de Keksi, desprès d’haver-se alliberat de les kilomètriques botes de cuir negre.

sábado, mayo 12, 2007

La botigueta, by Moi

Damas y caballeros: Pasen, pasen y vean. No se entretengan, hoy es
día de Mercado Fashion en Palacete.
La Comunidad Palaceteña está de enhorabuena, puesto que no deja de
crecer y crecer, cada vez somos más. Los Administradores ya no dan
abasto con tanta gente.
Tengo la felicidad y el orgullo de comunicarles que ponemos a su
disposición una línea de ropa de la marca "Palacete History X",
realizadas e ideadas por nuestro diseñador gráfico preferido, me
estoy refieriendo al Señor Alex. Igualmente quiero agrdecer a Don
Autòmata su inestimable colaboración en éste ilusionante y bonito
proyecto.
Las camisetas son de la máxima calidad, como pueden observar las
hay de diferentes tallas y colores, para todos los gustos. Las
hay de manga larga y también de manga corta para los días más
calurosos del verano. Con una de éstas camisetas, van a ser
ustedes la envidia de su círculo de amistades. Les recuerdo que
son unos diseños exclusivos y de edición limitada. El precio es
lo mejor, puesto que es muy económico. Con la compra de 2
camisetas se podrán llevar 1 póster de regalo con la foto del
Señor Cherinola recién levantado de la cama.
Igualmente queremos anunciar que próximamente, Palacete realizará
el primer "Concurso de Miss Camiseta Mojada". Nuestras Musas y a
la vez modelos profesionales, las señoritas, Patty, Morgana,
Penélope y Keksi, posarán para todos ustedes. Un experto jurado
compuesto por el resto de la fauna Palaceteña deberá elegir la
foto de mayor calidad artística. En caso de empate a sufragios,
el voto de Alex será dirimente y tendrá valor doble.

Así que ya lo saben, no dejen de adquirir estas maravillosas
t-shirts marca "Palacete", ideales para ponérselas los sábados
sabadetes. Debo confesarles que me las están quitando de las
manos, así que no se duerman en los laureles y decídanse ya.

El link a la tienda, aquí.




miércoles, mayo 09, 2007

Habemus Mayordomun, by Moisés Marichalar de Borbón


Mientras Rai y J caminaban por los imponentes y renacentistas pasillos de Palacete, Moisés, el Relaciones Públicas e Institucionales, se cruzaba en su camino por casualidad.

-Hombre! ya habéis llegado-dijo Moi.

-Sí, llevamos un rato en Palacete y nos dirijimos al despacho Oval de Fórceps para jugar la partida de Mus-aclaró Rai mientras le guiñaba un ojo a Moi.

Moi no entendió nada pero le siguió el juego. Lo que si vió el Relaciones Públicas es que J no estaba en condiciones de presentarse ante Fórceps, así que convenció a Rai para llevarse a J con el fin de acicalarlo.

La verdad es que tengo una mañana atareada pero este hombre debería cambiarse de ropa.-comentó Moi.

Me parece bien, realmente J parece un despojo humano. Tienes razón Moi, pero quiero que esté preparado en 15 minutos, ya hemos perdido suficiente tiempo por culpa del Señor Parado.-dijo Rai.

J cada vez estaba más desorientado, no entendía nada.

Moi se llevó a J a uno de los vestidores de Palacete dónde se almacenaban trajes, camisas, corbatas y todo tipo de ropa elegante. Allí apareció Keksi, una de las mujeres de Palacete y vinculada al Departamento de Protocolo, el cual también estaba controlado por el polifacético Moi.

Keksi fue la encargada de escoger la ropa para J. Ella propuso que J pasara antes por la ducha pero Moi se pensó que Keksi quería aprovecharse de J para realizar con él juegos eróticos en el Jacuzzi, así que la propuesta de Keksi fué denegada automáticamente.

-Ni hablar, vístelo, peínalo, afeitalo y mándaselo a Rai en 15 minutos.-aclaró Moi.



Moi desapareció de allí y se dirigió a su despacho, dónde se encontró con un hombre que le estaba esperando. Se trataba de un nuevo candidato para convertirse en Mayordomo de Palacete.

-Pase, pase, tome asiento caballero, llevo una mañana de perros, muy atareado pero a usted le estaba esperando con "candaletas".-dijo Moi.

El hombre se sentó mientras su interlocutor le echaba un vistazo al currículum a toda castaña.

-Cáspita, es asombroso, tiene usted más méritos que la mayoría de todos nosotros, no entiendo cómo alguien como usted quiere conformarse con ser un simple Mayordomo. Moi estaba desconcertado.

-La verdad es que soy una persona muy servicial, por suerte en mi familia, tenemos el dinero por castigo y yo lo único que pretendo es sentirme útil y que mi trabajo beneficie a mis semejantes.....

Moi pensó que aquél hombre estaba como un cencerro pero ciertamente tenía unas referencias inmejorables:

15 años en Buckhingham Palace como jefe de Mayordomos, MBA en Administración y Dirección de empresas, dominio de 5 idiomas y chapurreo del Cherinolí, cinturón negro de Karate y Aikido, carrera de hostelería con una nota media de 9, conociemintos de cocina en la Academia de Ferran Adrià.......y un largo, larguísimo etcétera....

Moi no salía de su asombro.

-Verá, buen hombre, aquí en Palacete cada vez somos más inquilinos y yo no doy más de sí, me multiplico por 5 pero voy de culo y en realidad mis obligaciones son otras. Así que es necesario la presencia de alguien que organice todas la tareas del Palacete, para ello, dispondrá usted de un harén de 12 sirvientas a las cuales deberá dirigir con mano firme, las fiscalizará y controlará. Eso sí, de tener relaciones con ellas será usted despedido.

-Hombre ¿por quién me ha tomado, por un salido?

-Jeje, no le tomo por nada carajo, solamente le aviso de lo que hay.-aclaró Moi.

-Piense que aquí en Palacete, está lleno de perturbados y desequilibrados mentales, así que no se fíe ni de su sombra. Es sólo un consejo pero hará bien en hacerme caso.

-Aparte de las sirvientas, usted también tendrá bajo su control a 3 jardineros, 2 chófers, 5 gorilas de la empresa de seguridad, 4 cocineros, 2 peluqueras, 1 masajista y 1 entrenador de fitness. Mi secretaría le detallará los pormenores del contrato.

Moi se levantó y se dieron la mano.

-Bienvenido a Palacete, señor...señor....-dijo Moi que no recorba el nombre del futuro mayordomo.

-Towers, Mr.Towers, para servirle a usted, a Dios y al Señó Cherinola.-Dijo Towers.

Seguidamente, Towers abandonó el despacho de Moi, el cuál, cogió el teléfono y contactó con Sucomandante.

-Habbemus Mayordomum- dijo Moi mientras se fumaba un puro.

-Fantástico, daremos un salto cualitativo enrome, ya lo verás. No hay que reparar en gastos- dijo Sucomm mientras se palpaba la entrepierna instintivamente.



Mientras tanto, Keksi ya había terminado con J.

-Está usted impecable, está para que le hagan un favor-decía Keksi mientras se le caía la baba observando la elegancia natural de J.

-Gracias señorita es usted muy amable.

-Ahora sí, ahora ya puede ir a reunirse con el Capitán Fórceps.

-Fórceps? quién es el Capitán Fórceps? y yo, ¿que coño estoy haciendo aquí?-dijo J desorientado....

J había vuelto a perder la memoria y no recordaba nada de lo sucedido en los últimos 15 minutos......

lunes, mayo 07, 2007

Un hombre debe pagar sus apuestas


El hecho de que J se olvidara por completo de todo cada cinco minutos fascinaba a Rai.

- De aquí tengo que sacar tajada como sea- pensó Rai para sus adentros. Tomó a J de la mano y lo llevó tras unos arbustos.

- J, ¿qué hay de lo mío?

- ¿Cómo dice?- respondió J con estupor.

- ¿Has olvidado que me debes una limpieza de sable de nuestra última apuesta?

- ¿Cómo?

- El Barça se cargó al Liverpool, así que me debes una desastascada.

- ¿No pasó el Liverpool? Jugaría que los ví jugar el otro día contra el Chelsea.

- Claro, la Charity Shield, o la Carling, o su puta madring. De rodillas.

J accedió entre disgustado y curioso. Rai contemplaba la escena con gesto de orgullo, apoyando ambas manos sobre su cadera. Le sorprendió gratamente la sospechosa habilidad de J en el arte de la ingesta de pene.

Hay cosas que no se olvidan, como montar en bicicleta- gimoteó Rai.

Mientras tanto, Parado había decidido descansar otro par de horas, tras haber estado podando las margaritas de Palacete durante unos buenos diez minutazos. Agazapado bajo un bonsái, había contemplado toda la escena entre J y Rai, con un apestoso celta corto entre sus labios y ambas manos en su esfínter hasta la altura del codo.

- Me dejas al olvidadizo un rato, Rai?- acertó a balbucear Parado, con los ojos entornados y una absurda expresión de bobalicón en su rostro.

- ¡Quita, tarado!- voceó un sorprendido Rai, molesto por la interrupción.

Procurando no alejar demasiado su glande de la campanilla de J, Rai consiguió hacerse con una piedra y se la tiró a Parado para ahuyentarlo, acertándole en pleno bulbo raquídeo.

- Ga, ga, ga, ga- masculló Parado desde el suelo, pataleando y con su puño en la boca.

Veinte minutos y cuatro apuestas saldadas más tarde, Rai tuvo a bien acercarle a J una caja de kleenex, y le instó a que le siguiera.

- J, te hemos hecho venir hasta aquí porque Rummi ha abandonado el país para ir a cubrir el gran premio de la república checa de motogp. Dice que quiere reflotar no sé qué parida de porra, y que su presencia en los grandes premios es vital para no sé que clasificaciones.

Lo importante, y aquí es donde entras tú en acción, es que Rummi era la pareja de mus del Capitán Fórceps, y ahora no podemos empezar la partida de esta tarde. Y, claro, los carajillos y los palillos ya están preparados, y no es plan de echarlo todo a perder.

“Zapatillas”, del Canto del Loco, interrumpió la conversación. Rai se alejó suspensión cautelarmente de J y descolgó su móvil:

- Oiga, ahora no puedo hablar. Pero todo está bajo control. Lo tengo aquí conmigo. Tenía usted razón, la excusa de la partida de mus ha sido cojonuda.

Al otro lado del hilo telefónico, un ser enigmático, calvo y feo rió con estruendo y acarició la cabeza de su gato, perdón, de su sicario. Ordenó a éste último que se desamorrara del pilón y que se retirara, que tenía asuntos muy urgentes que tratar:

- Sicario, desamórrate del pilón y retírate, que tengo asuntos muy urgentes que tratar.

Mientras, en Palacete…

- Perdona, J- dijo Rai. ¿Por dónde íbamos?

- ¿Usted quién es? ¿Le conozco?

- Buuufffffff- se quejó Rai. Esto va a ser más difícil de lo que yo creía.

¿Recuerdas que aún tienes que pagarme nuestra última apuesta?


viernes, mayo 04, 2007

Wireless telepathy, by Keksi Fried eggg

Las almas excepcionales tienen a encontrarse. La élite parece tener un marcador biológico que produce una feromona exclusiva que sólo es percibida por los otros miembros de la élite: este es su sutil medio de reconocerse entre la plebe. Y reconocerse es la única manera de alcanzar la completitud.

Cuando era joven, tenía en mi habitación una guitarra que solía dejar apoyada contra una silla durante la noche. Algunas veces, cuando el insomnio se apoderaba de mí, daba una palmada o dos y así como sonaba la palmada, así resonaban las cuerdas de la guitarra, en una débil melodía (sin instantaneidad) sólo perceptible en el nocturno silencio. Sus vibraciones invadían, como la niebla, la habitación, confortando el ánimo. La constatación de que existía una concordancia entre mis manos y la guitarra a pesar de la distancia inducía a una exaltada confianza en el orden primigenio del Cosmos. De la misma manera, nuestras almas vibran en resonancia ante la presencia de un igual, y el fenómeno es manifiesto en el Palacete, donde se van destilando las esencias lentamente, hasta conformar un elenco que el propio Olimpo envidiara.

*

* *

* * *

* * * *

* * * * *

Bueno, vale, de acuerdo. Ni tenía una guitarra ni resonaba con mis palmadas.

En realidad lo que resonaban eran los muelles del somier durante el habitual concurso nocturno de pedos al grito de “¡Fuego mientras haya munición!”.

Pero no hubiera quedado igual, reconocedlo.





Cien cañones por banda, viento en popa a toda vela




miércoles, mayo 02, 2007

Delicias orientales, by ElNan of the madriles



Rai acompaña a J por el jardin delantero hasta la entrada del Palacete. Alli les sale al paso Paradox, jardinero fiel del Capitan, ataviado con su tanga verde de defensor del ambiente total y una camiseta con el arco iris.

- Que majo este jardinero - piensa J- tan concienciado con el planeta tierra.

- Donde van los señores? Interpela Paradox

- Vamos a ver al Capitan, chulazo. Responde Rai.

- Pues no me pasen por aquí que acabo de regar las plantas y me van a poner el suelo de la entrada perdido. Ala! Vayan por el jardin de la piscina.

J. se mira a Paradox de arriba abajo y descubre de nuevo esa media sonrisa tan caracteristica de los habitantes del Palacete. “De que se reira el tio este?” se pregunta.

Mientras, Rai se habia adelantado y J. debe correr para ponerse a su altura. Cuando llega a su lado descubre un frondoso jardin junto a una piscina. Frente a las puertas de cristal que dan paso a la entrada de la casa se dispone un butacón bajo una sombrilla. En el esta Ant Hefner ataviado con una batin de lana angoleña y un grupito de señorit@s thai revoloteando a su alrededor.

- Quien se va a comer este cacahuete? Acierta a oir J. de boca de Ant mientras se acercan a la mesa bajo la sombrilla. Frente a la mesa y la butaca hay un televisor de plasma pegado a la pared.

- “Los cacahuetes estan sobrevalorados” dice una voz.

J. se da la vuelta pero no ve a nadie. Gira sobre si mismo 475º y no descubre de donde puede salir.

- J. Te presento a Ant.

J. descubre la media sonrisa en la cara de Ant y su mosqueo crece. Ant le saluda con un gesto de su cabeza mientras recuerda la noche anterior * y J se lo devuelve liftado y al fondo de la pista, donde hace daño.

- Ant, rey, donde esta el Capitan?

- Debe estar detrás practicando el swing.

Efectivamente, de fondo se oye musica de Gershwin a todo trapo, rasgado de cuerdas, con bajos profundos y ritmicos golpes de baqueta.

- “Gershwin esta sobrevalorado” dice de nuevo la voz.

J. vuelve a girar sobre si mismo 534º pero sigue sin descubrir de donde proviene la voz.

Al encararse de nuevo con Ant y Rai vuelve a descubrir esas sonrisas que tan mosca le tiene. “pero que les pasa a esta gente, ¿son gilipollas o que?” piensa

En ese instante alguien sube el volumen del televisor. En el, un reportero con camiseta de tirantes y shorts ajustados acaba su cronica:

“…es por eso que el alcalde en comunion con la presidenta de la comunidad de vecinos han decidido trasladar el macrobotellon del 23 de mayo a un smoking
room de la periferia de la capital. Se desconoce la ubicación concreta pero se cree que estara cerca del mar, en un palacete. Les ha informado Elnan, desde Alcala Meco, Madrid para TeleForceps”


- “Los macrobotellones estan sobrevalorados”

De nuevo J. rota sobre si mismo 729º pero sigue sin descubrir el origen de la voz.

Un sobresalto sobrecoge a J. Nota una mano en su entrepierna que tras bajarle pantalones y calzoncilo de felpa intenta leer el tatuaje alli ubicado: “Samantha” y un numero de telefono. De pronto un flashback ** asalta a J.


- Menudo cabron – dice uno de l@s thai que se ha acercado, despertandolo de su ensueño – eres como todos. Prometes el cielo pero luego nada. Al final te tatuaste el telefono de Samantha.

- “Samantha esta sobrevalorado”

El desconcierto de J crece. Se vuelve hacia Ant y Rai y les sorprende otra vez con esa sonrisa.

- Alguien me puede explicar por que me pasa lo que me pasa.

- Si ,no te preocupes vamos para alli.

Y juntos se dirigen hacia la parte trasera del Palacete.

Cuando giran la esquina J. se mira a Rai y le pregunta: ¿y tu quien eres?



---



PS: Ilustración by Álex.
"La noche anterior" y "flashback" son links a un espectáculo audiovisual en forma de corto.