La botigueta de l'Alex

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Dept. de Comunicación

Que Grande es el Cine, by Elnan

Palaceteños

Sara Carbonero, Musa Oficial

Sara Carbonero, Musa Oficial

sábado, agosto 23, 2008

Hacer obras duele


1: Cabeza

El techo del estudio hace cuesta abajo, 1,70 en su altura más baja. Ejerce de imán contínuamente con mi hipotálamo.

2: Cara

El disco para hacer regatas, también conocido como máquina infernal, escupe virutas como puños. Las gafas de sol como gafas de seguridad estan bien, pero no protegen el pómulo. El corte, apenas perceptible, es sexy pero.

3: Encima del culo

Ayer, por primera vez en mi vida, me dio lo que los no-oficinistas conoceis como pinchazo. Malditas racholicas. Lo mío es el despacho.

4: Dedo índice

No es agradable que te caiga una máquina de escribir antigua desde una altura de un metro y te achafe el dedo. Diagnóstico: quince días como el dedo entablillado.

5: Parmas de las manos

Callos. Dios mío. Si Rai me viera me retiraría la palabra.

6: Rodilla

El otro día oí un crec raro.

7: Gemelos

Agujetas. Normal. Yo sólo hago ejercicio las contadísimas veces que me pongo arriba y las aún más contadísimas que voy al gimnasio.

8: Tobillo

Me dí con el pico de una tochana de siete.


Seguiré reportando.

Si no vuelvo, cuidad de Moi.

lunes, agosto 04, 2008

El mal acecha, parte I


Lin llamó a la puerta de Palacete.

- ¿Moi? ¿No era Towers el mayordomo?

- Y lo es, pero está ocupado montando un ajedrez en vivo, ya sabes, otra tower. Yo le sustituyo. ¿Qué se le ofrece?

- Anúnciame, Moi, hoy es un día importante.

- Voy. Sígame.

Y se adentraron por pasillos, escalinatas y vericuetos hasta llegar a la Sala Refrescante del Viento Norte, en lo más alto de la torre del sur. Allí se solazaban Rai, Sub y Corser, bebiendo como bellacos y mintiendo como cosacos. O al revés.

- Señores - anunció Moi, - el señor Víctor desea verles.

- ¿Cómo que Víctor? - rugió Lin - ¡te he dicho Big Thor!

Y blandió amenazante su martillo, ante lo que Moi salió por piernas hacia la sala de al lado, desde donde podía escuchar con comodidad todo lo que hablaran. Cosas de la acústica.

Corser dejó de lanzar dardos a la diana donde había pegado la foto de Rai y le dijo a Lin:

- Bonito martillo. Esencial, diría yo.

- ¿Me lo dejas? -preguntó Sub - es que se le ha desencajado la cabeza a mi click de famobil y...

- ¡Silencio! - clamó Lin, muy en su papel, dando un martillazo sobre la mesa.

- Sobre la mesa lo que hay que dar son puñetazos, es una tradición - hablo Rai calmadamente. - Además, casi despeinas a Lula, que está metida ahí debajo. Haciéndome la pedicura. ¿Qué querías?

- Pues...como nuevo coad de Palacete, tengo el derecho y el deber de intentar solventar los problemas que se presenten. Y tenemos uno. Y grave.

- ¿Y?

- Pues que tenemos que buscar una solución entre todos y tal.

- ¿Quiénes son todos? ¿Todos los palaceteños?

- Bueno, sí, si es necesario, sí, pero creo que primero los coads deberíamos trazar las directrices, la estrategia... porque si no esto es un caos, vive Loki.

- Pues el Gnomo está en la siega del jalapeño, que ahora está en sazón, y Kek le está poniendo un pisito a un torero o algo así.

- Una mercería, al torero le está poniendo una mercería - apuntó Sub.

- Pero a ver, -dijo Rai - ¿de qué grave problema hablas?

- Hablo de un asunto que hace tiempo que colea y que se está enquistando: ¡hablo de Rummy!

- ¡Ah, bueno, eso! - dijo Corser - No pasa nada, es inofensivo.

- Manso como un corderito, cierto, -dijo Rai - por eso se enamoró de Blanqueta, eran almas gemelas: se asustaban del paso del tren, se asustaban si un pájaro levantaba el vuelo de pronto, se asustaban por la mañana al ver salir el sol... Eran felices asustándose juntos.

- Aquello terminó - dijo Lin.- Y terminó tan mal que Rumy quedó transformado. ¡Ahora es una bestia, una fiera, un greystoke desencadenado! ¡Desea apoderarse de Palacete, y no escatimará medios para conseguirlo!


Continuará, seguro