viene de aquí
pues sí. Un lío de cojones.
"Zi prenz la paztilla blau la història acabarà. Dezpertaraz al teu palau i creuràz el que vulguiz creure. Zi prenz la pastilla grana eztaràz al Paiz de les Meravellez i t’enzenyaré com de profunda éz la madriguera del conill"
"Payaso, este Forcepz", pensó Fórceps... y se comió las dos.
Despertó tres días después, ya vestido para la ocasión.
No reconocía a los integrantes de esa extraña habitación. El primero que le llamó la atención fue el colgado que daba órdenes, al frente de una pizarra. Iba vestido diferente al resto, con traje, corbata y una extraña máscara. Sujetaba un calendario e iba enseñando, junto con los meses, las fotos de once cuerpos desnudos. Y mientras arrancaba, una a una, las once hojas del calendario (sí, sólo once), gritaba el nombre de cada uno de ellos.
Había visto todos esos cuerpos desnudos tantas veces... Poco a poco recobraba la memoria. Eran ellos, la élite. Pero, ¿Qué hacían allí? ¿Y ese murmullo que se oía detrás de la puerta? ¿Y el de traje y corbata? ¿Esa máscara? -¡Chiringui!- espetó inmediatamente, al reconocerle. Todos se giraron, estupefactos y alarmados.
-Míster Chiringui-, le susurró el que tenía a su izquierda. Era Antonimus... o Julio, como prefiráis.
-Fórceps, cállese. Sigamos...- Arrancó Agosto, Raimon, bonito cuerpo. -Septiembre, Usted, Fórceps, Octubre, Eldeu y Noviembre, Rumuroleg. Bueno, ya sabéis como funciona todo esto. Estamos en una delicada situación, pero confío en vosotros. Hoy puede ser un gran día, o el peor de nuestras vidas. El último, mejor dicho. Nuestra única y última posibilidad de volver a nuestras antiguas costumbres en el palacete. Y estas molaban mogollón. Comer bien, drogas a mansalva y folleteo contínuo... Así que métansen bien, concéntresen, y olvidénsen de maricondas, coño-
Fórceps estaba confundido... Había estado en situaciones parecidas, en habitaciones como esa, tantas veces. Esas sensaciones, esa tensión tan palpable, las caras de sus compañeros...
Todos se levantaron, se dió cuenta enseguida de que todos iban vestidos igual. Menos Penélope, Miss Enero. Ella iba de negro, como Lev Yashin, "La Araña negra", pero con la vestimenta más ceñida a su cuerpo. Se levantó al instante. Al dar el primer paso, empero, se metió una hostia de tres (three) pares de cojones... Advirtió, entonces, el extraño calzado que llevaba. ¿Tacos de aluminio en la suela? Ya comprendió del todo.
Eso sí, el blaugrana le quedaba de puta madre.
No saltaron al campo cogidos de la mano de ningún niño. Tampoco sonaba de fondo la música de la Champions. Cómo dijo el Míster, mariconadas, las justas. Enfrente, como no, el Maligno. Pero no el que viste de color blanco "caca"... Esos dan miedo, pero no tanto. Los rivales eran, en su mayoría, "Depredadores" y "enanas blancas"... Estas últimas eran famosas por su velocidad... Ah! Sí! y buenas tetas... A pesar de lo que puedan pensar, eran rivales temibles, no sólo por lo feo de los depredadores y lo .... enano de las enanas, sino por lo que le explicaron los compañeros a Fórceps, Explicación que complementaba la información del Míster que hasta ese momento había intentado asimilar sin éxito.
-Ganamos-le comentaba, Parado, Febrero, lateral derecho- y de vuelta al Palacete. Perdemos, y no volveremos a meter el pito en ningún agujero, ¿taquedaoclarito? Eres nuestro "9", el que tiene que enchufar los golitos. Fórceps, deja el puto cigarrillo, que empieza el partido, nos jugamos mucho...
Casi se fue al balcón, a fumar, pero decidió quedarse.Un cigarro no le iba a privar de todos los placeres que le proporcionaba el palacete. De sus secretarias , de las orgías con sus súbditos. Una sonrisa se dibujó en su rostro, estaban volviendo todos los recuerdos, todos los buenos momentos, necesitaban ganar ese partido. Mientras todas esas bonitas imágenes se reproducían en su mente, se encendió otro pitillo
-Apágalo, ostias. Que empieza ya-Era Sub, el pivote defensivo, el organizador, el "6".
El pitido del árbitro activó todos sus sentidos. Como en sus años mozos, nada le distraía una vez comenzado el partido. Bueno, sí, las tetas de alguna enana blanca, pero poco.
La afición rugía, y no era a favor. Los pañuelos hicieron acto de presencia. El público, extraterrestres todos (ni puta idea de donde se jugó el partido, oigan), se dirigía con furia hacia el palco. Banyeres, desde su asiento presidencial, se mostraba impasible. Quienes le conocen sabían que la procesión iba por dentro.
En el vestuario, durante el descanso, Alex trataba de convencer a los demás que el partido estaba perdido. Los Depredadores eran demasiado grandes y fuertes, las enanas, demasiado...... enanas.
-Vámonos, escapemos. total, si no tenemos orgullo. He conseguido establecer comunicación con un par de contactos... Han cavado un túnel, llega hasta aquí, el vestuario. Sólo tenemos que arrancar el retrete y salir "throwing the milks away". Parecía haber convencido a la mayoría. Rummi tenía ya la cabeza metida en el cagadero.
-¡No!-exclamó Fórceps-podemos escapar, pero así no volveríamos jamás al Palacete. Ni podría dominar a las masas como he hecho hasta ahora. Ni percutir a todo ser viviente que me apeteciese... ¿Y vosotros? ¿Qué no viviaís bien bajo mi tiranía? ¿Oscarini, ya se que jode ir de blaugrana, pero no te jode más haber perdido tu status de Papa? ¿Y tú, Sub, poder abusar de Raimon y Parado cuando quieras? ¿Pe, ser la buena, la mala, haber pasado por las manos de todos y cada uno de los dementes estos? ¿Eldeu, volver a jugar en el Gratallops?... ¡déme eso!- Arrancó de las manos del Míster el bolígrafo que utilizaba para hurgarse la nariz, y comenzó a zigzaguear unas rayas en la pizarra.-Cogeré el balón aquí, me regatearé a este, a este, fintaré a este otro, le meteré mano a la enana que me pone como una moto, le haré un cañito al Depredador Cannavaro y marcaré el gol del triunfo.
-A ver, centrémonos-Era el Doctor Be, el otro central- Yo también quiero volver al palacete. ¡Soy el malo oficial! Pero esto no es "Evasión o Victoria", Fórceps. Y tu no eres Pelé. Yo me largo
Menos mal que había un cambio, entró Morgana, de las últimas en llegar, no por eso menos importante. El discurso de Forceps, que no la gilipollez de la pizarrita, les había convencido. La confianza del equipo había crecido hasta límites insospechados, y ya sabéis que en esto del fútbol, la confianza lo es todo.
A dos minutos del final, el marcador era de uno a uno... Gol en propia puerta fruto de una indecisión entre dos depredadores, sin duda desconcentrados por la belleza de las dos féminas del equipo contrario (ya, pelota, ¿y?). Una pared entre un depredador y una enana blanca fue interceptado por Parado, sin querer por supuesto. El rebote cayó a los pies de Raimon que trianguló con Jordi y Sub para acabar abriendo a banda.Ya sabemos que la circulación rápida de balón es esencial para que el extremo pueda encarar con ventaja a su marcador. Rummi, sin embargo, no encaró a nadie. Se cagó al ver al defensa y centró el balón sin mucho sentido. El balón voló por el aire, Eldeu y una enana saltaron hombro con hombro. El combate en el aire lo ganó Eldeu, que es pequeño, sabe Dios, pero que le sacaba un par de centímetros a la enana. La "bimba" no parecía tener dueño, hasta que la bajó Forceps con el pecho y, después de un ataque de tos, murmuró desafiante
-Au revoire
El disparo, potente, fuerte, intenso, enérgico, robusto, recio, pujante, esforzado, impetuoso, dinámico, duro, firme, resistente, formidable, poderoso, eficaz (anda que no mola buscar sinónimos en el diccionario) se marchó rozando el larguero. Qué pena.
El maligno, sin embargo, no pasó el control antidoping. No se entiende que el Palacetenc, sí. Pero eso es otra historia que tiene que ver más con Eufemyasshole Fountains (chiste patrocinado por Arévalo) que otra cosa.En todo caso, el comité sentenció la victoria del Palacetenc por 3 a 0. Hattrick de Eldeu. Y todos de vuelta al palacete. A tomar pol saco
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