La botigueta de l'Alex

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Palaceteños

Sara Carbonero, Musa Oficial

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jueves, septiembre 06, 2007

TERCERA Y ÚLTIMA PARTE DE LA TREMENDA Y LAMENTABLE CRÓNICA DE LA PRIMERA QUEDADA PALACETENYñA. POR FIN, by KEKSI FRIED EGG

El contingente palacetenyño en pleno salimos con aire digno del local, bajando las escaleras con elegancia.

Se imponía la búsqueda de un antro, garito o fumadero de opio a fin y efecto de tajarnos. Tajarnos de boquilla, porque la cruda realidad es que los cubatas escasearon, la timidez se impuso y el miedo a perder el control y hacer el ridículo impidieron que el alcohol corriera por nuestras venas, vive Yeltsin; bueno, no, ya no vive. Tampoco diré quiénes fueron los dos que sí se pidieron cubata, más que nada para no hacer quedar mal a Pe y a Rummy.

No hizo falta callejear demasiado hasta encontrar un lugar adecuado. El camarero era simpático y raro, creo que llamó “princesa” a Rai o algo así, se parecía bastante al príncipe Valiente, si éste hubiera tenido la cara redonda y procediera de Ultramar. El grupo del Dr. J estuvo comentando fútbol, creo que; yo estaba, de nuevo, en otra parte, hablando de otra cosa. En concreto, discutíamos los problemas de Moi debidos a su operación de cambio de sexo, y el consiguiente traslado de la Modelo a Wad-Ras, o viceversa. Allí estuvimos hasta que nos echaron porque iban a cerrar. Esto me hizo reflexionar: sí que cierran pronto los locales de recreo en esta Big City.

Entonces nos vimos de nuevo en la perra calle, vive Oliver Twist. Husmeamos por los rincones (siguiendo el ejemplo de Corser, que lo hace muy bien, cuestión de práctica) intentando encontrar una nueva guarida, sin sospechar que nos esperaba una sorpresa sorpresa, en la figura de la Palenzuela, que estaba por allí hablando con tres tíos muy feos, bueno, no, muy feos no, muy pintorescos, vamos a ser amables. A los chicos de Palacete les empezaron a temblar las rodillas, el Dr. J entró en un proceso de hiperventilación y a punto estuvo la cosa de acabar en tragedia, pero la entereza de que hacemos siempre gala las chicas de Palacete (Girl power, ¿verdad, Lula?) salió una vez más a relucir. Así que, ni corta pero sí perezosa, me fui a hablar con la susodicha.

- Hola, perdona, ¿eres la Palenzuela?- le dije con el gracejo que me caracteriza.

- Sí- me contestó, con la amable sonrisa y la locuacidad que la caracterizan a ella.

- Es que mira, estamos celebrando la Primera Quedada PalacetenyÑa, y están aquí los del clan Banyeres...

Le cambió la cara: los ojos le empezaron a hacer chiribitas y su sonrisa se hizo, si cabe, más luminosa. La muchacha se dirigió decididamente hacia los Palacetenyos mientras yo me quedaba pidiendo permiso a los acompañantes para robarles un rato a su chica. Bueno, en realidad me quedé hablando con ellos para contemplar detenidamente su pintoresquismo. Luego me uní al alegre grupo.

- ¿Quién de vosotros es el Cónfident?

- No, el Confidént no ha venido -le contestamos. Fijaros en la diferencia de acentos, he colocado tildes para que apreciéis el temita, vive Z.

- Aaahh, ¿Y el Capitán Fórceps?

- No, tampoco ha venido, pero aquí tienes al Dr. J, a Raimon, a Hrubesch, a...

- Aaaaahh, no, no me suenan. ¿Y quién de vosotros es el Cónfident?

Tras alcanzar las más altas cimas de la intelectualidad en la conversación con la simpática doncella, se hicieron las fotos de equipo de rigor. En esa tesitura estuvimos a punto de perder al excelente señó Cherinola, que dio con la rodilla en tierra por un desgraciado accidente, aunque todo quedó en un casi.

Y sí, la respuesta es sí, rotundamente sí, encontramos otro local donde tomar otra Voll. Y sí, también nos echaron al poco rato porque estaban a punto de cerrar. Así no hay quien se taje ni Subcomandante que me ladre.

De modo y manera que iniciamos la retirada hacia posiciones defensivas, a pesar de lo joven que era todavía la noche, y de nuevo nos sometimos al grato ritual de los besitos besitos y abracitos abracitos, esta vez para despedirnos.

Y el mundo no se acabó, a pesar de las agoreras profecías.

Y ahora que ya he terminado de narrar la ordalía, empieza el turno de ruegos y preguntas.

Nota bene: Hoy no hemos levantado ningún falso testimonio que no estuviera enhiesto ya con anterioridad.


***



PD by Subcomandante: Y, en el próximo post, el esperadísimo y secuestradísimo post de Chiringui.