Los funcionarios son vagos y te atienden mal y con desgana; la diferencia con los de aquí es que a los de allí no les avergüenza que veas que en lugar de atenderte están mirando el horóscopo por internet.
Esto lo hacen aunque el que esté al otro lado del mostrador también sea negro.
También se timan y se intentan robar entre ellos; por lo que no debe extrañar que si eres blanco multiplicarán el precio por 3.
Son pobres, pero les encanta salir de marcha.
Son muy presumidos, y se gastan el dinero en bubús (el típico vestido de mujer africana, con ese sombrero en la cabeza que parece un pañuelo retorcido) y trajes. También van mucho al peluquero.
Bamako, estación central de autobuses
Los peinados a base de trenzas les tiran tanto del pelo que les provocan cefaleas de caballo.
También les provoca cefalea ver un muslo. En cambio encuentran de lo más normal ver una teta.
Los pantalones cortos sólo los usan los niños y los turistas.
Si te mueres, tu hermano cuidará de tus hijos y de tu mujer (es decir, se casará con ella) y está obligado a honrarla dándole hijos (es decir, se la follará).
Siguen creyendo que los niños vienen con un pan debajo del brazo.
De camino al mercado
Son enfermizamente supersticiosos.
No tienen gatos en casa porque creen que son la reencarnación del mal.
No saben nadar. Si van en moto y tienen que cruzar el río cargándola en la piragua (el transbordador lo usan sólo los coches), llevan un chaleco salvavidas. ¿Dónde lo llevan? Puesto, evidentemente: van en moto todo el día con el chaleco puesto.
Ponen la gasolina por litros (literalmente, la venden dentro de botellas de bebida recicladas, en quioscos en medio de la calle).
En estos quioscos, y otros muchos que venden comida en general, suele haber una tele y una Play.
Tienen una cadena de TV pública, con una producción infame y con su telenovela, que paraliza el país al mediodía.
Piraguas en el Níger
En casa no tienen tele porque no suelen tener luz.
Los niños aplicados estudian en la calle, a la luz de las farolas.
Por muy aplicados que sean nunca llegarán muy lejos: se pasan los 3 primeros años de vida pegados a la espalda de su madre, prácticamente sin ningún estímulo, por lo que su capacidad cognitiva y su psicomotricidad (que parece ser que se desarrollan primordialmente en esta etapa) se reduce drásticarmente.
Se saludan cada vez que se ven. Se saludan quiere decir que se dan la mano y se preguntan mutuamente por la familia, qué tal has dormido, qué tal el trabajo, etc. durante 5 minutos (son frases hechas y fórmulas de cortesía, pero hay que decirlas).
Río arriba
Comen todos juntos, alrededor de la olla y con la mano. Siempre la derecha.
Si os dicen que se come con la mano derecha porque la izquierda es impura, es un eufemismo para decir que se limpian el culo con ella (no se van a gastar el dinero en papel higiénico).
Son unos guarros (pero claro, tampoco parece que les preocupe mucho): escupen (las mujeres también); no se lavan las manos después de haber comido con ellas; lo tiran todo al suelo.
No os molestéis en lavároslas vosotros, las manos. Total, cada 5 minutos se la tendréis que dar a alguien que por supuesto las llevará bien sucias.
Esto (lo de las manos) puede parecer divertido. Pero imaginaros que sois un cocinero o un médico (un cirujano!!).
Los cirujanos se pasean por todo el hospital con el pijama de operar; les da un status social.
Son incapaces de navegar a vela con el viento de proa. Si te ven hacerlo a ti, te honrarán como si hicieras magia (blanca).
Por la mañana, en la estación fría, a 25ºC, llevan gorro de lana y chaqueta de invierno; al mediodía, a 35ºC, se quitan el gorro pero la chaqueta no.
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